Intervalo
entre partos
La producción de leche solamente se iniciará
después del parto de una nueva cría. Es por eso, que para producir una mayor
cantidad de leche y mejorar nuestros ingresos por su comercialización, debemos
conseguir que la vaca logre parir cada año, que restablezca rápidamente sus
ciclos después del parto y quede preñada con facilidad.
Una buena vaca lechera debe parir anualmente
un ternero saludable y completar una lactancia normal, un intervalo entre
partos demasiado largo, ocasiona pérdidas económicas considerables, porque
reduce la cantidad de terneros y la producción de leche que puede obtener un
animal en toda su vida productiva, incrementa los costos directos por tratamientos
reproductivos o repetición de servicios y retrasa el avance del mejoramiento
genético del hato.
Aparición
del celo después del parto
Las vacas lecheras que tuvieron un buen
manejo y una alimentación apropiada, pueden restablecer sus ciclos rápidamente
y mostrar celo a los 30 días después del parto.
El parto para una vaca es un gran estrés y
afecta mucho su condición corporal, si el animal no ha llegado al parto en una
condición adecuada y no recibe una buena suplementación después del parto, la
vaca empieza a utilizar para la producción de leche las reservas nutricionales
que posee en su organismo, esto provoca su enflaquecimiento y ocasiona graves
trastornos fisiológicos que repercuten negativamente en el comportamiento
reproductivo del animal. Es por eso, que el manejo apropiado de la alimentación
antes y después del parto es muy importante.
El
apareamiento después del parto
Aunque se haya tenido un buen manejo y una
alimentación apropiada, la vaca no deberá ser servida en el primer celo que
ocurre alrededor de los 30 días después del parto, debido principalmente a que
el tejido celular del útero todavía se encuentra en etapa de recuperación o
involución, es por eso, que hay pocas probabilidades de que la vaca quede
preñada después de un apareamiento precoz pos-parto.
Cuando la vaca está bien manejada y tiene una
alimentación apropiada, el estado corporal y fisiológico regresa a su
normalidad, por lo tanto, el celo puede aparecer a los 30 días del parto
aproximadamente.
Sin embargo, la involución o recuperación del
útero (matriz), tarda un poco más de 30 días, si apareamos al animal sin que el
útero se haya recuperado completamente, no solo podría dificultar la
concepción, sino que puede causar una infección uterina.
Por lo tanto, el apareamiento después del
parto se debe realizar después de los 30 días.
Inicio
del apareamiento después del parto
Si la vaca queda preñada al poco tiempo del
parto, esta utilizará una gran parte de los nutrientes consumidos, para
mantener la preñez y desarrollar su cría, disminuyendo la cantidad de leche
producida y el tiempo de lactancia. Por lo tanto, se recomienda servir a la
vaca después de un Periodo de Espera Voluntario (PEV) de 50 a 60 días
pos-parto.
Para realizar un buen manejo reproductivo del
hato, se debe tener identificados todos los animales, registrar individualmente
la fecha de parto, identificación de madre, identificación del padre del
ternero, identificación de la cría, sexo de la cría, fecha de aparición del
celo, servicios, palpaciones y otras informaciones que sean necesarias para la
llevar un control reproductivo apropiado del hato.
También deben anotarse los tratamientos
reproductivos que realizó el veterinario, vacunaciones, desparasitaciones o
cualquier tipo de evento, estos registros hay que conservarlos y tenerlos a
mano, porque son de gran utilidad al momento de evaluar el comportamiento
reproductivo del hato, solucionar problemas y definir estrategias para mejorar
nuestra ganadería.
Registro
de los servicios (cruzamiento)
Se deben registrar todos los datos
relacionados con los servicios (fecha, identificación de la vaca y del toro,
monta natural, inseminación artificial, etc.). Las vacas presentan celo cada 21
días aproximadamente, si la vaca fue servida y queda preñada, esta no repetirá
el celo, por el contrario, en el caso de que no quede preñada, la vaca
presentará nuevamente el celo después de 21 días. Es muy importante que el
veterinario especialista realice el control ginecológico de los animales
periódicamente, para diagnosticar la preñez en las vacas que han recibido
servicios y el tratamiento de los animales que tienen problemas reproductivos.
Cuando el aparato reproductivo de una vaca
está funcionando normalmente, debe quedar preñada con un solo servicio, caso
contrario, repetirá el celo después de 21 días aproximadamente.
En caso de que la vaca tenga ciclos
irregulares o que vuelva a repetir el celo después de varios servicios, hay que
sospechar de algún problema reproductivo y consultar al veterinario.
Repetición
del celo después del servicio
Si la vaca repite el celo constantemente
después del servicio, existe la posibilidad de que tenga alguna alteración en
su sistema reproductivo que le esté causando problemas y le impida quedar
preñada. Muchos factores pueden causar estos problemas reproductivos, un
inadecuado manejo, mala alimentación que esté ocasionando deficiencia de
nutrientes, vitaminas o minerales, el estrés por el calor, enfermedades infecciosas
de la reproducción, problemas genéticos, etc.
La continua repetición del celo se debe a
problemas reproductivos. Podemos señalar que la mayoría de las veces estos
problemas son causados por un mal manejo, deficiente infraestructura,
inadecuada alimentación y mal manejo sanitario.
El problema alimenticio se puede solucionar mejorando
el manejo de las pasturas o suministrando suplementos, hay que evitar el estrés
por calor proveyendo a los animales suficiente sombra y agua, también debemos
establecer un calendario sanitario para la prevención de las enfermedades
infecciosas y por último, recibir asesoramiento técnico periódico.
Detección
temprana de los problemas reproductivos
En el caso de que la vaca haya tenido un
aborto, un parto anormal o difícil, retención de placenta, secreciones
malolientes, no haya presentado celos después de 60 días del parto, en caso de
presentarlos, el comportamiento del celo es anormal, tiene ciclos irregulares o
repite el celo después de varios servicios, el animal debe ser atendido por el
veterinario especialista para que realice el tratamiento oportuno y adecuado
del animal, mientras más temprano se realice el tratamiento de los problemas reproductivos,
mayor posibilidad de recuperación de las funciones reproductivas normales del
animal.
Por eso es muy importante la permanente
observación de los animales y el registro de todos los eventos de importancia
en la ganadería, además de contar con asistencia técnica periódica.
Los problemas reproductivos se pueden tratar
con medicamentos, sin embargo, es mucho más importante prevenirlos mejorando el
manejo, la sanidad y la alimentación de los animales, si no se mejoran estas
condiciones, los tratamientos no tendrán efecto y los problemas se repetirán.
Por lo tanto, recibamos asesoramiento y
apliquemos las recomendaciones del veterinario, de esta forma mejoraremos
nuestra ganadería.