Además de las gramíneas para pastoreo es muy común tener en las fincas ganaderas áreas para producción adicional de forraje, que permiten ofrecerles a los animales una mejor alimentación, sobre todo en épocas en las que el pastoreo se dificulta, principalmente durante los períodos secos, o en las zonas más húmedas por exceso de precipitación. Este forraje adicional puede ofrecérseles fresco a los animales (Bancos Forrajeros) o conservarse para usarlo posteriormente (Forrajes Conservados). Normalmente se manejan con mayor tecnología que los pastos de piso, con fertilización y sistemas de riego.
Los suplementos forrajeros se convierten en el alimento más importante en los sistemas en que no se pastorea, como son los estabulados (o confinados) que se dan en lechería y engorde intensivo. Estos forrajes de corte y acarreo utilizados en grandes cantidades exigen mecanización; en esos casos se hacen inversiones en tractores, cosechadoras y vehículos de transporte.
Los bancos forrajeros
Los bancos forrajeros son parcelas que se siembran para usarse en fresco como suplementos fibrosos para el ganado. Pueden cortarse, picarse y ofrecerse a los animales en comederos (sistemas de corte y acarreo) o, en algunos casos, también en sistemas de pastoreo/ramoneo. Normalmente se combinan con el pastoreo, pero existen fincas en las que toda la alimentación se basa en el uso de los bancos forrajeros. Dependiendo del tipo de especie que se use, deben complementarse con otros alimentos, de manera que los animales reciban todos los nutrientes que requieren. Por ejemplo, si se usa caña de azúcar, que es baja en proteína, debe combinarse con otros suplementos que aporten la proteína faltante. Por otro lado, cuando se usan arbustivas (usualmente altas en proteína), el nutriente más limitante es la energía, por lo que se debe suplir melaza, granos u otra fuente que la aporte.
Existen muchos tipos y especies de plantas que se usan en los bancos forrajeros se usan gramíneas de corte de alto rendimiento (caña de azúcar o pastos del género Pennisetum) y arbustivas, que pueden o no ser leguminosas. Cada especie tiene características que definen las distancias de siembra, estrategia de fertilización, control de malezas, el intervalo entre cortes, y en general su manejo.
Las gramíneas de corte tienen una amplia historia de uso (el pasto Gigante se conoce desde los años 60s), principalmente en fincas lecheras y de doble propósito.
Tipos de bancos forrajeros y sus características
Fuente: PÉREZ, E. 2017.
Referencia Bibliográfica
PÉREZ, E. 2017. Manual de Manejo: Sistemas intensivos sostenibles de ganadería de leche. Instituto Nacional de Innovación y Transferencia en Tecnología Agropecuaria (INTA). San José, Costa Rica. 54 p.